Top 10 de historias más tristes de Demon Slayer
CrunchyrollDemon Slayer tiene su buena dosis de momentos desgarradores, ya que la historia arroja luz sobre los trágicos orígenes de los personajes. He aquí las 10 historias más tristes.
Demon Slayer, también conocida como Kimetsu no Yaiba, es una serie de anime de fantasía oscura muy popular. Sigue la historia de Tanjiro, cuya familia es atacada por un demonio, dejando a su hermana Nezuko como única superviviente, aunque convertida en demonio.
Tanjiro se une al Cuerpo de Cazadores de Demonios para encontrar una cura para Nezuko. La serie ofrece personajes entrañables, villanos intrigantes, acción, comedia y una trama emocionante. Es un shonen oscuro con historias de fondo trágicas y está lleno de giros inesperados.
Advertencia: Hay spoilers del manga.
Contenido
- Historias más tristes
- Giyu Tomioka
- Muichiro Tokito
- Yoriichi Tsugikuni
- Kanao Tsuyuri
- Gyomei Himejima
- Tengen Uzui
- Sanemi Shinazugawa
- Gyutaro
- Obanai Iguro
- Akaza
Historias más tristes de Demon Slayer
Demon Slayer está lleno de historias de personajes con trasfondos conmovedores y trágicos. Entre ellas, destaca la de Shinobu Kocho. También está la historia de Giyu Tomioka, quien experimentó la pérdida devastadora de su amada y maestra, lo que lo sumió en un profundo dolor y lo llevó a luchar contra los demonios con determinación.
10. Giyu Tomioka
La cuarta temporada de Demon Slayer revelará el trágico pasado de Giyu. La hermana de Giyu murió mientras le protegía de un demonio, dejándole con un inmenso sentimiento de culpa. Además, Giyu entrenó junto a Sabito bajo las órdenes de Urokodaki.
Giyu quedó inconsciente mientras luchaba contra el demonio de la mano. Se despierta y descubre que Sabito murió mientras luchaba contra el demonio, razón por la cual nunca se sintió digno de ser un Hashira. Lleva su medio haori para recordar a las dos personas más importantes de su vida.
9. Muichiro Tokito
Muichiro sufría insomnio tras lo ocurrido en su pasado. Recuperó la memoria durante su lucha con Gyokko. Él y su hermano gemelo mayor, Yuichiro, sólo se tenían el uno al otro cuando murieron sus padres. Kagaya y su esposa Amane se ofrecieron a llevarlos al Cuerpo de Cazadores de Demonios, ya que ambos eran descendientes de Michikatsu Tsugikuni (Kokushibo Superior).
Sin embargo, Yuichiro los rechazó para proteger a su hermano. No mucho después, se produjo otra tragedia cuando los hermanos fueron víctimas de un ataque demoníaco. Yuichiro murió mientras protegía a Muichiro, mientras que éste perdió todos sus recuerdos. Por eso los ojos de Muichiro siempre parecían vacíos antes de recuperar sus recuerdos.
8. Yoriichi Tsugikuni
Yoriichi Tsugikuni, reconocido como el Progenitor de Respiración Solar en Demon Slayer, se destaca no solo como el guerrero más poderoso, sino también por la profundidad de su tragedia personal. Originario de una familia noble, Yoriichi enfrentó desde su nacimiento la cruel desaprobación de su padre debido a una marca facial y la superstición sobre los gemelos como portadores de mal augurio.
Dotado de habilidades excepcionales desde su juventud, Yoriichi superó a su hermano gemelo Michikatsu, quien, en un giro oscuro, se unió al bando de los demonios bajo la influencia de Muzan. Este giro de eventos lo colocó en la mira de los cazadores de demonios, enfrentando críticas y ostracismo que acentuaron su aislamiento emocional.
La tragedia alcanzó su punto máximo con la pérdida de su esposa embarazada a manos de un demonio durante su ausencia, sumiendo a Yoriichi en un profundo dolor y remordimiento. A pesar de su formidable fuerza, su vida se vio marcada por la soledad y la angustia.
El reencuentro con su hermano demonio, Kokushibo, décadas más tarde, añadió otro capítulo desgarrador a su historia. A pesar de sus esfuerzos por encontrar redención, Yoriichi sucumbió al paso del tiempo, enfrentándose a su destino con una mezcla de compasión y determinación. Su muerte, aunque no en batalla, dejó un impacto duradero en su hermano, dejándolo reflexionando sobre las decisiones que lo llevaron por el camino oscuro.
7. Kanao Tsuyuri
Kanao sufrió una infancia marcada por la extrema pobreza y el abuso a manos de sus padres, quienes la maltrataban a ella y a sus hermanos, llegando incluso a intentar ahogarlos por los errores más mínimos. Despertarse y descubrir que alguno de sus hermanos había fallecido durante la noche era una experiencia traumática recurrente.
Esta situación llevó a Kanao a cerrarse emocionalmente, dejando de hablar y de mostrar cualquier tipo de emoción. Eventualmente, perdió la capacidad de pensar en sí misma, y sus padres la vendieron como esclava. Afortunadamente, fue rescatada por Kanae, quien la acogió como a una hermana. Sin embargo, la dificultad de Kanao para expresar sus emociones o tomar decisiones por sí misma persistió durante mucho tiempo.
6. Gyomei Himejima
Durante el entrenamiento de Hashira, Gyomei le cuenta a Tanjiro su pasado. Crió huérfanos en un templo, pero uno de ellos rompió las reglas y se encontró con un demonio. Ese niño atrajo al demonio al templo con la esperanza de salvarle la vida y no dudó en sacrificar a Gyomei y a los demás niños.
Cuatro niños murieron inmediatamente mientras Gyomei intentaba proteger a los demás, pero éstos huyeron excepto uno que era demasiado pequeño para caminar. Pensó que como era ciego y tenía un cuerpo débil, los niños no confiaban en él. Al final acabaron muriendo, y Gyomei mató de alguna manera al demonio para proteger al niño que quedaba.
Le culparon de la muerte de esos niños por un malentendido, pero Kagaya consiguió salvarle. Desde entonces, Gyomei perdió la fe en los niños. Sin embargo, cuando estaba a las puertas de la muerte, se dio cuenta de que los niños huyeron porque querían obtener ayuda por su bien. Pensaban que era débil, así que necesitaban protegerle.
5. Tengen Uzui
Tengen nació y creció en un clan shinobi donde se menospreciaba la vida. El entrenamiento era brutal, y tres de sus hermanos murieron antes de cumplir los 10 años. Mientras tanto, al resto de sus hermanos se les obligaba a matarse entre sí mientras estaban vendados.
Solo Tengen y su hermano menor sobrevivieron al tormento. Sin embargo, tanto su padre como su hermano creían que matar a personas inocentes era necesario para la supervivencia de su clan. Tengen aborrecía esta ideología y dejó el clan con sus esposas para convertirse en un cazador de demonios.
4. Sanemi Shinazugawa
El profundo odio de Sanemi hacia los demonios proviene de su pasado. Su maltratador padre fue asesinado por alguien por rencor. Como hijo mayor, cuidaba de su madre y sus hermanos. Sin embargo, su madre se convierte en demonio y empieza a matar a sus hijos.
Sanemi la mató para proteger a Genya, pero éste ya estaba traumatizado y le culpó de todo. Desde entonces, los hermanos se separaron y Genya intentó desesperadamente reconciliarse con su hermano mayor. Sin embargo, Sanemi siempre lo alejaba.
Comenzó a matar demonios por su cuenta hasta que se encontró con Masachika y se unió al Cuerpo de Cazadores de Demonios. Sanemi pensó que Genya lo odiaba. Lamentablemente, los hermanos no resuelven su malentendido hasta que Genya da su último suspiro.
3. Gyutaro
La segunda temporada de Demon Slayer exploró las historias de Tengen y Uzui. Gyutaro nació en el Distrito del Entretenimiento, donde enfrentaba hostilidades constantes debido a su apariencia. Su madre abusiva y sus secuaces lo maltrataban regularmente. Sin acceso a condiciones básicas de vida, Gyutaro carecía de higiene y se veía obligado a subsistir con una dieta de alimañas de la carretera.
Su hermana Daki, en contraste, era agraciada, lo que facilitaba su existencia. Gyutaro la apreciaba profundamente. Sin embargo, un pretendiente la prendió fuego, causando su muerte. Fue entonces cuando Douma los encontró y les ofreció transformarse en demonios. Ante la ausencia de alternativas, Gyutaro aceptó la oferta sin titubear, y ambos hermanos vivieron como demonios durante aproximadamente un siglo.
2. Obanai Iguro
El único Hashira que odia a los demonios más que Sanemi es Obanai. Nació en una familia que adoraba a un demonio femenino parecido a una serpiente. Sacrificaban a los recién nacidos y a los miembros de la familia por dinero u otros objetos de valor.
Obanai fue encerrado en una celda desde el día en que nació, ya que era el primer varón que nacía en la familia en años. La hembra demonio estaba fascinada con él y planeaba comérselo cuando fuera lo suficientemente mayor. Su familia le cortó la boca más ancha para que pudiera parecerse a un demonio.
Obanai acabó huyendo, y el demonio mató a su familia por despecho. El demonio también le habría matado si el anterior Hashira de la Llama, Shinjuro Rengoku, no le hubiera salvado a tiempo. Sin embargo, Obanai seguía teniendo miedo a las mujeres, y sólo podía relacionarse con Mitsuri sin tener miedo.
1. Akaza
Sorprendentemente, el trasfondo de Akaza resulta ser más desgarrador que el de cualquier otro personaje en Demon Slayer. La historia de este se revela durante el Arco de la Fortaleza Dimensional Infinita. Antes de su transformación en demonio, Akaza era conocido como Hakuji y se veía obligado a robar para costear las medicinas de su padre. Desesperado al ver a su hijo marcado como un criminal a causa de sus actos, el padre de Akaza optó por quitarse la vida.
Posteriormente, Hakuji fue desterrado de su aldea y acabó en un dojo, donde se comprometió con la hija del maestro. Sin embargo, otra tragedia azotó cuando los rivales del dojo envenenaron el pozo, lo que resultó en la muerte del maestro del dojo y de su prometida.
Aunque Hakuji logró derrotar a los culpables por sí solo, no pudo soportar el peso del dolor. Fue entonces cuando Muzan lo encontró y, abrumado por el sufrimiento, Hakuji no dudó en renunciar a su humanidad para convertirse en demonio.
Y ahí lo tienes, estas son las 10 historias más tristes de personajes en Demon Slayer. Es posible que la lista se alargue mientras más temporadas y capítulos del manga sean estrenados.