Este espeluznante glitch en Baldur’s Gate 3 conmociona a los jugadores

Manuel Gutiérrez
glitch en Baldur's Gate 3 - 2

La comunidad de Baldur’s Gate 3 se horrorizó cuando un jugador compartió un glitch que hacía que los personajes del juego tuvieran expresiones faciales escalofriantes.

No hay duda, Baldur’s Gate 3 ha superado con creces las expectativas de Larian Studio. Esto gracias a su jugabilidad diversa y casi inmaculada que permite a los jugadores crear su propia historia.

Pero el juego no ha estado exento de glitches, como los Goblins gritando a un estante vacío. O el de Karniss atrapado en un ciclo interminable de dolor gracias a la Maldición de las Sombras, esto por poner algunos ejemplos.

Mientras que el glitch de Karniss horrorizó a los jugadores, un nuevo glitch ha asustado a otros tantos, ya que ha provocado que todos los personajes de Baldur’s Gate 3 tengan expresiones faciales de película de terror, con sonrisas inquietantes.

El glitch de Baldur’s Gate 3 que asustó a los jugadores

Un jugador de Baldur’s Gate 3 estaba tranquilo disfrutando de su partida. Luego descubrió que los personajes de su juego no tenían el aspecto habitual. El usuario comentó: “Tengo la sensación de haber roto algo“.

Los jugadores se mostraron escépticos al ver que los personajes a los que habían cogido cariño mostraban expresiones tan extrañas e inquietantes que jamás habían visto.

Vaya momento para tener ojos“, bromeó un jugador. “Min parece que ha desencajado la mandíbula y está a punto de devorarme“, dijo otro.

A otros les pareció que la expresión tenía un extraño parecido con una infame figura de la trilogía cinematográfica de El Señor de los Anillos, la Boca de Sauron.

Mi amo, Sauron el Grande, te da la bienvenida. ¿Hay alguien en esta ruta con autoridad para tratar conmigo?“, comentó uno de los jugadores de Baldur’s Gate 3, haciendo referencia a la interacción entre Sauron con Aragorn en una escena:

Sin embargo, a los jugadores no les molestó el glitch de BG3, y consideran que las posibilidades ilimitadas y los giros inesperados del juego (aunque sean fallos) son lo que lo hace tan entrañable.