El streaming de ECS S8 de CSGO, suspendido por una posible amenaza de bomba

María Pastoriza

Un caso de “paquete sospechoso” se ha dado esta pasada noche en la celebración de la octava temporada de CS: GO Esports Championship Series, que tuvo que suspender su retransmisión en directo.

La octava temporada de CS: GO Esports Championship Series (ECS) se suspendió esta pasada madrugada mientras el Departamento de Policía de Santa Mónica investigaba una posible amenaza de bomba cerca del estudio de ECS.

La transmisión se detuvo en medio del encuentro entre Team Liquid y eUnited. Mientras los equipos continuaron jugando, el personal de FACEIT abandonó el edificio debido a la amenaza.

Momentos de tensión

La transmisión volvió a estar en línea a través de un observador remoto, pero los comentarios no estaban disponibles debido a las circunstancias.

El caster de CS: GO y vicepresidente de FACEIT, James Bardolph, se encargó de explicar en Twitter que el personal de ECS tenía que “evacuar el edificio” con la posibilidad de “una bomba en el paseo marítimo” justo fuera de su oficina de Santa Mónica.

El SMPD envió un escuadrón de detección de bombas al lugar y dejó a la Oficina de Aplicación Especial del LASD en espera.

Después de una hora, el SMPD confirmó que el paquete sospechoso no representaba “ninguna amenaza” para el público. Desde entonces, FACEIT reanudó la retransmisión de la ECS.

Malos recuerdos

En agosto del año pasado se dio el primer atentado en un torneo de esports, en Estados Unidos. El torneo de Madden NFL en Jacksonville se vio interrumpido por un tiroteo que dejó cuatro muertos y once heridos, nueve de ellos heridos de bala por el propio asesino.

Aquel terrible suceso marcó un antes y un después en los esports, llevando a cuestionarse la seguridad en determinados eventos (y reforzándose esta en otros tantos desde entonces). Por otro lado, también llevó de nuevo al eterno debate de si son los videojuegos los que llevan a esta violencia.

Por suerte, en esta ocasión, en Santa Mónica, las autoridades han actuado rápidamente ante la sospecha y no hay que lamentar ninguna pérdida.