Análisis de Need for Speed: Heat
Need for Speed: Heat es la nueva entrega de la conocida franquicia de conducción. En este artículo, os contamos cuáles han sido nuestras impresiones sobre el juego.
La entrega anterior a Heat en la franquicia Need for Speed no consiguió cumplir las expectativas de los fans. Payback no tuvo una recepción demasiado amable entre prensa y fans, y cuando se anunció este nuevo título, muchos se preguntaron si Ghost Games, la desarrolladora, sería capaz de sobreponerse al golpe.
Para aquellos que queráis una respuesta rápida: Heat es un gran título de conducción, que únicamente falla (a opinión de este redactor) en la IA y diseño de la policía en una parte del título. Pero como diría Jack el Destripador: “vamos por partes”. Os contamos qué nos ha parecido Need for Speed: Heat.
¿Día o noche?
El juego se divide en dos grandes secciones: el día y la noche. Por el día, podremos competir en carreras legales, en las que podremos conseguir dinero para personalizar nuestro vehículo (o comprar coches nuevos). La noche, sin embargo, será diferente. Aquí aumentaremos sensiblemente nuestra reputación en la ciudad en carreras ilegales.
Se trata de una dualidad realmente interesante, siendo las dos partes indispensables para poder avanzar en el juego. A menudo, se nos pedirá tener cierto rango de reputación para poder continuar en la trama.
Mientras que por la mañana la cosa será sencilla, la noche nos pondrá al límite. En el caso en el que la policía consiga detenernos (o nos destroce el coche), acabaremos la noche y conseguiremos muy poca reputación.
En ocasiones, tocará decidir si intentamos correr todas las carreras que se puedan en esa noche o si ganamos unas cuantas y volvemos a la seguridad del garaje. El coche se reparará de forma automática en cada sesión de día o noche.
El mapa de Need for Speed: Heat es enorme
Otro punto a favor del juego es su mapa, bastante grande y con retos por superar. El título nos plantea retos de diversa índole, como destruir las vallas publicitarias de la policía o ir a cierta velocidad en los controles de seguridad.
Debido al tamaño del mapa, podremos desbloquear el viaje rápido al visitar ciertos garajes. De esta forma, lo tendremos algo más fácil a hora de movernos, sobre todo cuando hayamos desbloqueado un buen puñado de circuitos.
Y es que las carreras en este juego están repartidas por todo el mapa. El día y la noche tendrán distintas pistas que recorrer, y conforme consigamos cierto rango tendremos más y más disponibles. Podremos disfrutar de estas carreras tantas veces como queramos.
Pese a que en el mapa sí veremos la ubicación de los garajes, no veremos el lugar en el que se encuentran los retos. Esto nos incentivará a recorrer las extensas carreteras, pues cada zona tendrá unos retos asociados, y completar todos los retos de cada sitio nos dará recompensas adicionales.
Control e IA: una de cal y otra de arena
En líneas generales, el control de Heat está muy pulido. Es bastante obvio que es un juego arcade, y no cuesta mucho aprender las mecánicas que plantea el juego. Quizás el apartado en el que el juego se resiente más es en la IA de la policía. Por la noche, la policía nos perseguirá si participamos en carreras ilegales, lo que ocasionará persecuciones de infarto.
Por un lado, el agobio y el estrés de estas persecuciones están muy conseguidos. No obstante, parte de ese estrés tiene que ver con la conducta casi suicida de los agentes de la ley. En muchas ocasiones, la policía embestirá sin miedo nuestro coche de forma tremendamente agresiva, y si a esa ecuación le sumamos dos o tres patrullas más, nos hemos llegado a topar con situaciones en las que lo único que pudimos hacer es ver como nos vapuleaban sin tiempo siquiera a reaccionar.
Por lo que parece, los coches de la policía “escalan” con el nuestro. Independientemente del vehículo que tengamos, costará dejarles atrás, y habrá que tirar de freno de mano y de argucias para conseguir darles esquinazo.
La personalización de este Need for Speed: Heat es una de las mejores hasta la fecha en la franquicia
Este es el apartado en el que, sin duda alguna, Ghost Games saca músculo. Además de una enorme oferta de vehículos, nos encontramos con mucha variedad en lo que a piezas se refiere. Conforme avancemos de rango podremos conseguir nuevos vehículos y piezas, lo que abre un auténtico mundo de posibilidades.
Otro punto a favor es la personalización en lo que a diseño se refiere. El juego nos permitirá crear diseños realmente variopintos. Y no sois demasiado imaginativos, siempre podéis copiar algún estilo creado por la comunidad.
Conclusiones
No voy a ponerle una nota al juego porque considero que es algo enteramente subjetivo. Los amantes del género automovilístico se encontrarán con un juego lleno de coches, personalización y un mundo abierto que explorar.
Por si esto fuera poco, también cuenta con un buen puñado de circuitos. Y la guinda del pastel es el sistema de día/noche, que aporta una enorme variedad al juego. La agresividad de la policía gustará a los jugadores en busca de retos, y Heat supone una gigantesca mejora respecto a Payback.
Si lo que estáis buscando es un Need for Speed similar a la época dorada de la saga, estáis de enhorabuena, porque Heat os va a encantar.