¿Qué sucede cuando derrotas a todos los Berserkers en God of War Ragnarok?

Derrotar a todos y cada uno de los Berserkers en God of War Ragnarok no es poca cosa, pero el reto merece la pena, y esto es lo que ocurre cuando los derrotas a todos.

Con God of War de 2018 las valquirias se alzaron como uno de los desafíos más grandes. Había ocho en total repartidas por los reinos y, al combatirlas, se conseguía un combate final con su reina Sigrun.

En la secuela de 2022, Ragnarok sustituye a las valquirias por los berserkers. Dado que las Valkirias han sido conquistadas, una nueva amenaza ocupa su lugar. Como es de esperar, estos combates contra los Berserkers son tan duros como los anteriores.

Pero, ¿qué ocurre cuando superas todos los jefes? Si eres un veterano de la serie, puede que ya tengas idea de lo que ocurre, pero esto es lo que ocurre al derrotar a cada Berserker en Ragnarok.

AVISO DE SPOILERS

A partir de este punto entramos en territorio de spoilers y hablaremos de muchas de las mayores sorpresas de God of War Ragnarok. Te recomendamos encarecidamente que experimentes la historia por ti mismo antes de seguir leyendo, ya que muchos giros e la trama y sorpresas se descubren mejor en tu propia partida. No obstante, si sigues leyendo vas por tu propia cuenta y riesgo.

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¿Qué ocurre cuando derrotas a todos los Berserkers en God of War Ragnarok?

Independientemente del orden en el que te enfrentes a ellos, derrotar a todos los Berserkers en todos los reinos de Ragnarok llevan al mismo final. Una vez derribados todos, se desbloquea un combate secreto contra el jefe final.

Este último desafío se encuentra en Midgard, justamente en la lápida donde conociste a los Berserkers por primera vez. Podemos interactuar con ella cuando estemos preparados para activar el paso final.

Como esta es una de las tareas más difíciles de todo Ragnarok, te recomendamos que la dejes para casi el final del juego por su dificultad. Del mismo modo, si entramos al combate con un nivel inferior o sin el equipo más potente para el final del juego lo pasaremos bastante mal. Por ello, te recomendamos explorar un poco más y volver cuando se hayan atado casi todos los cabos.

La pelea contra el Rey Hrolf Kraki en God of War Ragnarok

Al interactuar con la tumba, el Rey Hrolf Kraki se levantará del suelo. El propio Rey de los Berserkers aparece para desafiar a Kratos y vengarse de sus aliados caídos.

En serio, este combate no es ninguna broma. Junto con Gna, es una de las dos batallas más difíciles de todo el juego. Espera morir y muchísimo. Tendremos que dedicar tiempo a aprender los patrones de ataque del Rey y cómo aprovechar mejor las fugaces oportunidades que tenemos para atacar.

Si hacemos un ataque rúnico a la vez, no conseguiremos mucho, ya que el rey tiene una barra de salud muy grande. Es inútil que intentemos concentrar el daño porque no llegaremos muy lejos con esa táctica. En su lugar, es vital que calculemos el tiempo de nuestros ataques y cambiar de arma mientras las otras se recargan. Igualmente utilizar la invocación de nuestro compañero para escalonar al objetivo y hacer todo lo posible por rodar cuando sea posible.

Asimismo, también tendremos que estar atentos a ciertos ataques de recarga. Por fortuna, todos ellos los podemos interrumpir, pero apenas tienes una fracción de segundo para reaccionar. Ya sea golpeando con el escudo, usando un ataque a distancia o incluso seleccionando la flecha adecuada, debemos de estar atentos y pensar rápido.

Recompensa de la empuñadura de Skofnung

Al superar el desafío y acabar con el rey Hrolf Kraki, desbloquearemos la empuñadura de Skofnung, posiblemente la reliquia más poderosa de Ragnarok. Aunque tiene un enfriamiento de 236 segundos merece la pena.

Al activar esta reliquia, Kratos invoca una espada mística que desata su poder a partir de las almas de su interior (los Berserkers que derribamos). Además, podemos invocar el poder conjunto de los jefes que derribamos a lo largo del viaje para limpiar cualquier reino.