Sifu, el juego kung-fu de Sloclap, está arrasando en número de jugadores
sloclapSifu, el juego de artes marciales, está arrasando entre los gamers, llegando a superar el millón en número de jugadores.
Aclamado como uno de los primeros aspirantes al GOTY y aplaudido por la crítica internacional de Oriente y Occidente, el juego de acción de kung-fu Sifu, del desarrollador y editor independiente Sloclap (Absolver), ha alcanzado el millón de unidades vendidas en las tres primeras semanas tras su lanzamiento global. Sifu está disponible en PlayStation y en PC a través de Epic Games Store por 39,99 euros.
Se ha publicado hoy un tráiler donde se muestra una selección de los elogios que el juego ha recibido durante estas semanas de parte de la crítica especializada de todo el mundo.
Sifu triunfa en ventas y número de jugadores
Hasta la fecha se han jugado más de 10 millones de horas. De los jugadores de Sifu, más del 45% han completado el desafiante segundo nivel del juego, y ahora están en camino de completar su venganza. Más de 150.000 jugadores ya han dominado el kung-fu lo suficiente como para vencer a Yang, el principal antagonista del juego. Muy pocos son los que han logrado superar su venganza y han conseguido Wude, es decir, el verdadero final del juego.
Estamos encantados con la acogida de , tanto por parte de los fans como de la prensa”, dijo Pierre Tarno, productor ejecutivo de Sloclap. “Nos propusimos crear un auténtico juego de acción basado en el kung-fu rindiendo homenaje a nuestras películas de kung-fu favoritas”.
Sifu está ambientado en una ciudad china ficticia, con un detallado trasfondo, en la que los jugadores descubrirán un antiguo misterio mientras confrontan una serie de difíciles enfrentamientos que ponen a prueba sus habilidades más allá de sus límites. Para superar los obstáculos que, aparentemente, parecen insalvables, los luchadores deben confiar en el dominio del kung-fu y en un colgante mágico que los revive después de la muerte. Sin embargo, el coste del hechizo es elevado y envejece drásticamente al luchador cada vez que vuelve a la vida: el tiempo es el precio que se paga por la venganza.